jueves, 22 de octubre de 2015

BoyHood

BOYHOOD de Richard Linklater





Como todo el mundo sabe, esta película llegó a nuestros cines con la principal novedad de su forma de rodaje, realizado durante 12 años, y nos cuenta la vida de un niño, durante esos años, desde su niñez hasta la mayoría de edad.
Es esta peculiaridad del rodaje, la que nos permite ver los cambios físicos reales en los personajes a lo largo de los años. Y la evolución psicológica viene dada por el maravilloso guión que firma el propio director.
La historia, por lo tanto, se centra en Mason, y nosotros, los espectadores nos convertimos en sus compañeros de este viaje maravilloso. Aunque lo que verdaderamente hace brillar a la película son los personajes secundarios. La hermana de Mason, interpretada por la hija del director, que resulta un descubrimiento refrescante con una presencia arrolladora ante la cámara. Y sobre todo sus padres, encarnados por unos magníficos Ethan Hawke y Patricia Arquette, especialmente esta última, que se merece todos los premios recibidos durante la temporada pasada y más.

Y si la historia te envuelve, no lo hace menos, la fotografía deliciosa y el montaje tan natural, haciendo las transiciones a lo largo de los años muy fluidas y sólo visible en los cambios físicos de los personajes. Parte del encanto de la película es la cantidad de referencias a la cultura popular del momento, lo que nos permite a los espectadores situarnos fácilmente por esos pequeños detalles, como una canción que suena en la radio, o algún comentario sobre la situación política, o incluso por el uso de la tecnología. 
Todo ello hace que la película se haya convertido para muchos de nosotros como en un viaje personal, junto a los personajes, con los que te identificas y a los que se les quiere, y a pesar de su duración de 160minutos, sólo deseas que no termine nunca.
Para terminar, sólo decir que el director Richard Linklater, con esta película y después de la trilogía “Antes de…” es uno de los directores más interesantes del panorama actual y desde luego, el que mejor representa la importancia del paso del tiempo en las relaciones personales.

Gracias por este regalo maravilloso en forma de película, Richard.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario